Como cada año desde hace 9,
celebramos en el CEIP Santuario,
la Fiesta del Agua.
Ponemos mangueras y Periquitos.
Y se mojan todos los que participan.
Con este calor apetece
...... y nos divertimos.
Lo primero es venir bien preparado, con bañador, chanclas, toalla, cremita protectora para el sol, y juguetes para el agua como pistolas o cubos.
En clase nos preparamos con ayuda de las mamás:
luego salimos al patio, donde el Profe lo ha preparado todo, y tomamos posiciones con nuestras toallas:
A continuación, cargamos nuestras armas y nos preparamos para tan singular batalla acuática:
Una primera toma de contacto con el agüita fresquita, en el periquito y allá vamos..................
Esto es muy divertido, nos mojamos todos y de todas maneras.
Tenemos cuidado para no resbalar, aunque siempre hay alguien que se cae y pierde las chanclas.
Somos unos estupendos saltadores sobre el agua
El Profe nos riega con una potente manguera, pero, nosotros no nos asustamos y llegamos hasta él para mojarlo también
Hay un cubo para recargar las armas, pero está muy cerca de la manguera y tiene su peligro.
Pero el agüita fresquita apetece, no asusta.......
y las mamás nos ayudan a repostar.
Es una batalla muy divertida y refrescante.
Algunos arriesgan mucho y están todo el tiempo atacando.
Así, se mojan más que nadie..
Claro, se llevan la peor parte.
El agüita fresquita les ataca por todas partes.
El Profe se defiende como puede.
Porque nosotros somos muchos.
No nos asusta el agua, al contrario, es estupendo poder estar fresquito en un día con tanto calor.
El Profe rellena el depósito, para que tengamos más provisiones y siga el juego.
Las madres también nos ayudan a repostar.
Aunque, también se llevan un buen repaso y acaban empapadas.
Es estupendo celebrar la
Fiesta del Agua.
Al Final descansamos un rato al Sol para secarnos y tranquilizarnos un poquito, y nos vamos para clase a quitarnos la ropa mojada antes de irnos para casa o al comedor.
Las Madres y Padres nos ayudan en esta importante tarea.
Siempre parece que va a sobrar ropa, o se pierde algo importante a última hora.
Finalmente todo queda muy bien.